Apareció, Como Una Brisa De Verano Que Llega De La Nada Y Por Cosas Comunes.

Apareció, como una brisa de verano que llega de la nada y por cosas comunes.

Lo noté pero no era mi propósito conocerlo a fondo. Se acercó y me habló de cosas banales, lo hacía reír sin proponerlo y decía que eso le gustaba, él comenzaba a alegrar mis días sin darme cuenta.

Los días pasaron y nos fuimos conociendo más, la confianza surgió y las palabras ya no bastaron. Surgieron miradas, caricias y hasta una que otra palabra de cariño.

Ahora estamos aquí, compartiendo momentos bonitos, sonrisas en el alma y secretos de la vida.

El Sr. P apareció y ha sido de las mejores casualidades que me ha dado la vida.